sábado, 19 de febrero de 2011

Promesas rotas

Este día me va a partir el alma, lentamente.
Es ya 19 de febrero.
Hace un año... hace un año, en unas horas, nos veíamos de nuevo. Nos despedíamos sobre las 23.00, pero no me importaba: al día siguiente estaría contigo.
Fui a la cama tarde, por los nervios, por seguir planeando mi "huida" contigo, pero fui feliz. O falsamente feliz, sabiendo ahora lo que sé.
Un 20 de febrero, sábado, de hace un año, me hacías tuya en la oscuridad de la noche. Me hacías feliz, libre, mujer, niña también, segura de mí misma y de ti. Me susurrabas palabras que sonaban tan bien y tan reales

"Cariño; Confía en mí; ¿Quieres seguir?; Tranquila; Sólo hasta donde tú quieras; Me encanta tu pelo; Me encanta tu cuello; Me gustan tus piernas; Qué suave es tu piel; Estás temblando; Mi peque..."

Claro que sí. Contigo todo era "Sí".

Tumbado a mi lado, desnudo, me prometiste algo. Algo que hace poco he descubierto que no has cumplido.

Me has hecho daño, me has matado y te has quedado con todo lo que sentía: con mis sentimientos, con mis ilusiones, con mis recuerdos irrealizables de nuevo...

Eres lo peor que existe encima de la Tierra. Y amo a lo peor que existe encima de la Tierra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario