sábado, 13 de febrero de 2010

Miedos, fantasmas

Inunda la angustia cuando sabes que la persona deseada puede enamorarse de otra. Aumenta al conocer que de ti no lo está. Que no comparte tu sentimiento.
Hay que enfrentarse a los miedos, ya vengan de uno mismo, de fuera, o de ambos frentes.
Así lo hago y con cierta frecuencia y más que temor te pregunto:

-¿Apareció ella?

Tú siempre respondes que no.

Y yo pienso que quizás nunca aparezca, o quizás ya lo hizo. Puede que algún día lo haga, o puede que ya haya aparecido y, cuando quieras darte cuenta, no haya vuelta atrás y ya me haya ido.

Y aún así conservo la confianza y espero que te des cuenta pronto o sea yo quien se vaya, para no volver a estos miedos.

Mis ilusiones y mis dudas acerca de tu sentir... malditos fantasmas.

Y tengo la obligación de advertirte de que cada vez hay menos tiempo a tu favor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario